Ya metidos en diciembre, parece que por fin el otoño quiere llegar a su fin dejando pasar los fríos del invierno, sus nieblas y heladas matinales, su poca luz y mucha noche. El invierno me trae frío y me trae abrigos largos, guantes sin dedos y gorros calados, oscuridad de alma y refugio de hogar, invocar a los lares y disfrutar del viento helado que me agrieta la cara y achina los ojos. Por las mañanas la gente se cierra en sí misma, abrigándose con el espíritu y mil capas de ropa, mirada fija a un objetivo y vagar por las calles echando vaho por la boca, como chimeneas que avisan del esfuerzo. Por fin parece que llega el invierno, y cuando a media mañana veo un rayo de sol, lo disfruto como si no lo hubiera visto nunca. Por fin siento el invierno, no me gustan las medias tintas.
martes, 13 de diciembre de 2011
Por fin invierno
Ya metidos en diciembre, parece que por fin el otoño quiere llegar a su fin dejando pasar los fríos del invierno, sus nieblas y heladas matinales, su poca luz y mucha noche. El invierno me trae frío y me trae abrigos largos, guantes sin dedos y gorros calados, oscuridad de alma y refugio de hogar, invocar a los lares y disfrutar del viento helado que me agrieta la cara y achina los ojos. Por las mañanas la gente se cierra en sí misma, abrigándose con el espíritu y mil capas de ropa, mirada fija a un objetivo y vagar por las calles echando vaho por la boca, como chimeneas que avisan del esfuerzo. Por fin parece que llega el invierno, y cuando a media mañana veo un rayo de sol, lo disfruto como si no lo hubiera visto nunca. Por fin siento el invierno, no me gustan las medias tintas.
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