Políticos cegatos y mentirosos en el crac del 2007

Estamos donde estamos por los que estamos, mientras algunos economistas y políticos se empeñan en culpar al conjunto de los ciudadanos, los más acertados apuntan a unos malos gestores y dirigentes que sólo toman las decisiones apuntando siempre a los mismos y liberando a las castas más adineradas o privilegiadas. Pero justo es que con un poco de perspectiva miremos hacia atrás y analicemos sobre los datos lo que pasó y lo que está pasando, y como por nuestros votos son capaces de mentirnos y nosotros no podemos exigirles nada y ellos nos lo piden todo.

Los datos referentes al paro y a la creación de empresas son demoledores, en 2006 ya se inicia una tendencia de aumento, pero es en el 2007 donde hace crac todo el sistema, en dos años se produce una sangría espantosa de las cifras del paro, en las que Rodríguez Zapatero ha contribuido con 3.114.400 parados más, a una media de 445.000 parados por año que estuvo gobernando, teniendo en cuenta que sólo en los años 2007 al 2009 creó 2.398.900 parados más, dos años en los que negaba que estábamos en crisis. Rajoy por su parte en su primer año y con recorte más recorte, no ha conseguido frenar el aumento del paro, sumando 504.500 parados nuevos. Las empresas en el periodo de 2007 a 2009 han caído en 227.601, sin contar los autónomos que se han quedado por el camino.

Por esos datos ruboriza ver las campañas electorales con las que ambos candidatos pedían nuestro voto. Zapatero nos pedía que creyésemos en él y que trabajaría por el pleno empleo, la pena es que trabajó mucho más por el pleno desempleo, creando más de 3 millones de parados nuevos. Rajoy se ofrecía como el cambio, como la esperanza, como el mesías en el que iban a confiar los mercados y las empresas y con la medicina para parar la sangría del desempleo. La realidad ha demostrado todo lo contrario, le toca vivir entre sus propias mentiras y en lugar de reconocerlas las niega, cayendo en la ceguera de su predecesor y anuncia que en el año que viene seguirá creciendo el paro. Ver para creer.

Y es que miras los números del paro desde el 2007 y uno no entiende como algunos todavía tienen la desvergüenza de no querer cambiar un pasado al que no deberían mirar por otras muchas cosas buenas que hayan hecho por el camino. Ni se entiende a los que llegan nuevos para cometer los mismos errores de los anteriores cuya ceguera les hace ver brotes verdes en donde no hay más que un futuro incierto gestionado en sus manos. Y lo peor de decir mentiras es que cuando se dice alguna verdad, no se cree.

Y nos seguían mintiendo en sus publicidades electorales, unos diciendo que no es lo mismo, y otros prometiendo a una clase media que arrastran a clase baja a la que recortan cada vez más sus ingresos mediante impuestos, les quitan sanidad, les quitan educación, tenían la osadía de prometerles que llegarían a fin de mes. Muchos de los que ahora tienen que acudir a Bancos de Alimentos u otros sitios para poder comer, o dependen de lo que les pueden dar sus padres o familiares, tendrían muchas ganas de decirle algo a Mariano Rajoy a este respecto.

Y es que el balance de estos cinco años negros no puede ser peor, desde el 2007 se han perdido 3.156.900 trabajadores y cotizantes, para aumentar además en 3.850.500 los nuevos parados y demandantes de subsidio. Su ceguera les impide ver la prioridad, y ésta, no se llama recorte, se llama creación de empleo, creación de empresas y ahí es donde hay que ser valiente, y apoyar al crecimiento de un país, fomentando, facilitando el acceso a la inversión y ayudando en lugar de poner zancadillas. Las soluciones de los recortes, que son necesarias, sólo ayudan a los que desde más allá de nuestras fronteras esperan cobrar lo que nos dejaron. Gestionen bien, y recorten donde hay que recortar aunque les duela, quiten políticos, elimínense privilegios, donen la mitad de sus sueldos a la gente que menos tiene, demuestren que se mueven por algo más que por sus propios intereses.

Y así seguían vendiéndose en sus campañas, los ciegos diciendo que tenían los pies en la tierra, cuando estaban hundidos hasta el cuello, y los mentirosos prometiendo que iban a mejorar nuestras vidas y lo que han conseguido es lanzarnos a todos a la calle para mostrar nuestra indignación y engaño, pidiendo una mayoría absoluta, no para gobernar, y sí para imponer.

Y mientras las empresas siguen cayendo, marcando ese 2007 como el año en que cambiaron nuestras vidas, donde el futuro pasó de años vista a meses vista, donde nos hemos visto sufrir a nosotros mismos y a todos los que queremos, y lo que es peor, unos dirigentes que confían más en la suerte que en sus decisiones como gestores de un país que les entregamos cada vez que les votamos con sus mentiras.

Ellos nos mienten, nosotros los aguantamos, los sufrimos. Más allá de unos colores, de un bipartidismo que usa las mismas armas para llegar al poder, más allá de que unos recorten por un lado y otros lo hagan por otro, ninguno de los dos hacen lo que prometen. Si privatizásemos los Gobiernos, algo que parece le gusta mucho al actual, ellos serían los primeros en engrosar las cifras del paro, serían los primeros despedidos por no cumplir lo prometido y por mirar hacia otros lados cuando el problema lo tienen delante. Le llaman fraude electoral a los votos comprados y a otras artes para intentar conseguir el poder de forma ilícita, para mi el segundo mandato de Zapatero y el primero de Rajoy son un fraude electoral que estamos pagando todos.