Corría el año 1939, o tal vez el 1940, cuando Matilde Rueda quería que un fotógrafo plasmase esta estampa familiar. Eran años duros, como todos los que le había tocado vivir, seis hijos que alimentar y dos que todavía faltaban por llegar. Aquella mañana sacó dos sillas al patio siguiendo las indicaciones del fotógrafo, vistió a sus hijos con las mejores galas, las del domingo, algunas heredades, casi todas pequeñas ya, las mangas cortas delataban lo bien que se aprovechaban las prendas. Justo Quintanar, el padre de tanta prole no era amigo de salir en las fotos, no le gustaban esos artilugios que plasmaban en un papel el tiempo.
Matilde Rueda, la gran abuela Matilde se rodeó de sus hijos e hijas, se muestra casi desconocida, del luto permanente con el que la conocí y de su pelo blanco siempre en coleta, pasa a tener un pelo moreno y un vestido con un dibujo ligero, en la foto tendría 31 ó 32 años, y ya tenía toda una jauría a sus pies. Por la izquierda Matilde, con su chaqueta y vestidos blancos, formal, sin saber que con el paso de los años y todavía casi una niña se marcharía a Argentina, como tantos otros, donde todavía sigue. A su derecha Felisa, la mayor, estirada y dos garrillas por piernas, fuerte y segura como lo fue siempre mientras estuvo con nosotros. Con pantalón corto, de pie y con las piernas cruzadas, Alberto, un hombre tranquilo de sonrisa sincera, pese a lo serio que se mostraba en la foto. En la silla Paco, un hombre fuerte y bueno, con el pantalón hasta arriba en la foto. Matilde lleva en brazos a Ricardo, con meses de vida, en el momento de la foto se movió y debido a la exposición su cara se desdibuja en el tiempo, andador nato y de voz ronca por el tabaco en la actualidad. A la derecha de todos José, de los chicos el mayor, espigado y valiente, trabajador incansable y el único, junto con Alberto que han permanecido en Anguiano.
Todos ellos y dos chicas que faltan: Mari, cocinera y habladora infatigable, y Carmen, la pequeña, que los vio crecer a todos. Todos, son los Piñarras, un auténtico clan de buena gente y de manos recias, de grandes trabajadores y luchadores, pero sobre todo de magníficas personas. En honor a todos ellos, sus hijos, los nietos de Matilde y los apegados, nos reunimos por Gracias en septiembre y comemos juntos, un buen momento para vernos, y recordar que todo tiene un origen y es bueno cuidarlo.
Piñarra/01: Ana
Piñarra de origen: Carmen.
Después de no haber podido asistir a la Piñarrada de 2010 por la boda de nuestro primo Iván (Ibán como le gusta a él), asistíamos a la de este año y éramos uno más, June estaba con nosotros en nuestra primera comida en un restaurante fuera de casa. Sus primos Unax y Uxue, los UU, estuvieron siempre atentos con su prima, siempre atentos a su lado, era un no parar.
Comimos en Baños, que también estaban en fiestas, así que compartimos restaurante con una despedida de soltero de una sirena de mar con flotador y todo, no nos juntamos todos, faltaban Chus, Laura y Rafa, esperemos que al siguiente puedan venir.
Piñarra/02: Esteban
Piñarra de origen: Carmen
Esteban es uno de los más trabajadores en la conexión Piñarra de Gasteiz, siempre atento, dispuesto y con un gusto musical más que cuestionable, ser fan, hoy en día, de Raffaella Carrá no es fácil.
Piñarra/03: Raquel
Piñarra de origen: Mari
Raquel, a la izquierda, se encontraba guapísima, su maternidad del pequeño David, un tocayo de pro, le había sentado realmente bien, lástima que su merluza se perdiera en el túnel del tiempo.
Maite entre dos Piñarras trataba de sobrevivir degustando la fenomenal ensaladilla rusa que le habían puesto con guisantes y plagada de cebolla, que para alguien a la que no le gusta la hortaliza que hace llorar.
Piñarra/04: Justo
Piñarra de origen: Mari
Justo es un tipo muy grande, trabajador, buena gente, con pista de aterrizaje y mejor humor. Siempre dispuesto a ayudar y desvivido por sus sobrinos, los de Chus, y ahora con David, auténtico mozo de Uruñuela.
Piñarra/05: Chuchi
Piñarra de origen: José
Nadie sabe muy bien su nombre, siempre se llamó Chuchi, dicen las buenas lenguas que fue uno de los fundadores de Anguiano, pues su figura y su presencia se recuerdan desde tiempos ancestrales en las calles de su pueblo. Por mala suerte tenía el brazo roto del día anterior, pero eso no fue obstáculo para que se perdiera la comida de la Piñarrada ni las fiestas de Anguiano, hasta ahí podíamos llegar.
Begoña siempre al lado de Chuchi, aquí amansando a la fiera de June que fue pasando de mano en mano, de brazo en brazo.
Piñarra/06: Pedro Ignacio
Piñarra de origen: Carmen
Siempre con carita de bueno y corazón de más, atento y correcto, siempre prudente y mejor comedor y bebedor. Un auténtico Piñarra de corazón.
Mientras la comida transcurría, la clasificación de la Fórmula 1 estaba en la tele, una televisión de las antiguas en la que la emisión panorámica se veía truncada y no se podían ver las clasificaciones, todo un jeroglífico intentar saber quién había hecho esos tiempos. Muchas risas, soluciones para el mundo y puestas al día mientras se comían unas pochas, menestra y lo que iba quedando de los segundos.
Piñarra de origen: José
A la izquierda el pequeño de los hermanos, danzador incansable y domador de hierros, en la comida siempre con la mirada atenta a Alonso, era el que nos ponía al minuto de las clasificaciones. Arropado entre Marta, la pequeña de Chuchi y Begoña, y Marino y Dani, parecia que la fiesta no iba con él, no hagáis caso.
Piñarra/08: Marino
Piñarra de origen: José
Él es el hombre tranquilo, paciente y comedido, que se combina a la perfección con la energía y la fuerza de la Dani, dos personas muy grandes.
Lidia, se perdía con una cámara de vídeo mientras la camarera repetía sin cesar los postres, Tito atento a la comanda, y el resto en un barullo de voces, de ilusión por estar juntos.
Raquel, la pequeña de Richar y Lidia, se lo pasó en grande con el resto de los pequeños, con Ana, Marta, Uxue y todos los que se apuntaban, tan pronto desaparecían como aparecían milagrosamente con la llegada de los postres, la magia de los niños.
Piñarra/09: Estela
Piñarra de origen: Paco
Profesora y domadora de fieras, tranquila y aventurera, acompañada siempre del Chini, al que esta vez le faltó la guitarra para hacernos un recital.
Richar va pasando la información de la clasificación, Tito hace como que no oye pero se percata de todo, Ana, la hija de Estela, engulle su helado mientras las madres discuten por su postre.
Piñarra/10: Maite
Piñarra de origen: Alberto
En el centro y siempre con una sonrisa está Maite, de voz dulce, de corazón abierto, con Tito siempre a su lado, el otro hombre tranquilo. Magdalena a la derecha diserta con las niñas intentando negociar el postre.
En un determinado momento, Magdalena se dedicó a contar intimidades y con un claro gesto habló de tamaños y de medidas, o al menos eso parece, la cara de José Félix todo un poema, la de Maite animando.
Piñarra/11: José Félix
Piñarra de origen: José
El mayor de todos los Piñarras, el artífice de que cada año nos juntemos, buena gente por todos los lados, cariñoso y siempre al lado de Magdalena y su hija Andrea, ahora en la aventura de estudiar fuera de casa.
Así pasamos una comida brillante, la pena que al ser la mesa tan larga nos veíamos por partes, pero no todo podía ser perfecto. Postres, copas y risas hasta tarde.
Al final siempre llega lo peor, pagar, pero tras discusiones y divisiones a mano y con calculadora quedó claro el resultado. Un año más nos habíamos juntado, los Piñarras y los que estamos a su vera, con la clara seguridad que han heredado un gran corazón, han aprendido a ser buena gente y son trabajadores incansables. Va por vosotros Piñarras.
Sí que hay una buena tropa de "piñarras", sí señor.
ResponderEliminarPero da gusto disfrutar de un día juntos aunque al final sea muy corto y no nos demos cuenta y tengamos que salir corriendo para no perdernos la danza
Si es que habéis salido todos muy bailarines
ResponderEliminarDavid te ha quedado muy bonito muchimas gracias por la descripcion de toda la familia que pena no haber ido
ResponderEliminarUn beso
Gracias Lucía, y bienvenida por estos lares, no te preocupes que la próxima nos vemos.
ResponderEliminarUn beso.
David,somos Marino y Dani ,que bonito reportaje nos hemos reido un rato. Muchas gracias
ResponderEliminarUn placer teneros por aquí, me alegro que os haya gustado.
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte para los dos.