Festival de vida y muerte II: el cementerio

En Xcaret en una de sus partes altas se reproduce un cementerio mexicano -salvando las distancias que nos puede dar un parque recreado-, allí se pueden apreciar un montón de tumbas diferentes, cargadas de rimas o versos satíricos (también llamados calaveritas) que son en realidad epitafios humorísticos que los vivos les recuerdan a los muertos en su tumba. También se pueden dedicar calaveritas a los vivos hablando como si éstos estuvieran ya muertos.

Al cementerio se accede por un camino con forma de elipse que asciende hasta el final para luego descender en otra elipse, en el paseo -además de unas vistas preciosas- se ven un montón de tumbas, algunas serias (pocas) y otras muy divertidas, os muestro algunas de ellas para que os hagáis idea de lo que os cuento. En la foto podéis ver como han reproducido la escultura del perro del difunto que está como esperando que salga de la iglesia.

Mientras en la de la izquierda se puede ver una gran cruz floral en la tumba de la derecha vemos una tinaja con la foto de la difunta dentro, en la entrada flores, un plátano y un limón como ofrenda.

En la de la izquierda sobre una tumba clásica, velas, un plátano y una lima con la foto del difunto, flores y pétalos junto a un plato de frijoles y dice: "Cara o cruz le tocó, carga con la cruz. Te llora tu mujer". En  la de la derecha sobre una tumba toda forrada en piedras y con una cruz floral le acompañan un cuenco de agua, una calabaza y sobre la lápida dice: "Ramón Galán Kuk. Aquí yace el casanova del sureste, el mayor conquistador ahora es sólo polvo, pero… ¡qué polvazo!".

La de la izquierda es un tumba clásica en piedra con ofrendas de flores, plátanos y manzanas y en una piedra que parece decir: "Está al fin en el último paradero de su vida". La de la derecha es la de una viuda de un agricultor y refleja su pobreza aunque la parte de la lápida está preciosamente decorada con azulejos y flores y dice: "María González Vda. de Pech. María lo fue todo, pero ahora no es nada".

La de la izquierda se muestra con gran colorido, es una iglesia de colores amarillos, naranjas, rosas y azules, parece casi un juguete y es la tumba de una niña. La de la derecha es también otra parroquia pero más humilde, en la ofrenda se puede ver una calabaza y cacahuetes.

Esta tumba es la de Miguelín, un camionero al que su familia para honrarle le pusieron un neumático como los de Michelín, dos retrovisores y hasta las bocinas junto a las flores. La tumba tiene forma de cama.

La tumba de la izquierda es como una tarta de cumpleaños de tres pisos coronada por un angelote que toca una trompeta, como ofrendas cacahuetes, una calabaza, un plátano, una manzana y flores. En la de la derecha es muy graciosa, sobre la foto del matrimonio y en azulejo está escrito el mensaje que le deja el marido a su mujer: "Pily. Cuando yo muera si es que me voy primero, haz de seguir sintiendo que vivo junto a ti, y han de ser nuestras noches como las del mes de enero y serán las mañanas como las del mes de abril. Cuando yo muera no quiero que me llores porque al llorar me perturbas mi sueño sepulcral, cubre todo mi cuerpo de muy frágiles flores y en la cabeza ponme una que sea rosa. No dejes que te agobie la dolorosa pena ni olvides que te espero a donde yo me voy, porque después de muerto he de poder amarte porque el amor no muere como no muero yo. Cuando yo muera, si es que me voy primero, haz de seguir sintiendo que vivo junto a ti y haz de demostrar al mundo, como el amor sincero hasta la misma tumba no deja de existir. Yo marcharé contento a preparar terreno al mundo de las almas donde hemos de llegar y pediré permiso, al siempre ser supremo, pero que cuando mueras te vengo yo a esperar. Ardalio".

La tumba de la izquierda está dedicada a un vidriero y por eso la iglesia está hecha toda con botellas de cristal azul, la lápida está toda cubierta de guijarros blancos y negros y sobre ellos un pan de
muertos. La de la derecha en blanco sobre azul y con cacahuetes y plátano de ofrenda dice: "Elías Barrera Gil. Murió sin ton ni son. Te judes, nomás te vamos a estrañar".

La de la izquierda es una iglesia hecha con mármol negro y con una escalinata que está cubierta de flores, a la izquierda casi no se aprecia pero tiene toda una torre blanca. La de la derecha es la tumba de los más pobres, sobre la cruz se coloca en este caso la camisola de una mujer.

Esta tumba es impresionante, representa a una cómoda cama de sábanas blancas con cabecero, con un libro abierto en el que dice: "María Elena Caral Vargas. Concilió el sueño eterno".

La de la izquierda está dedicada a un gran bebedor de cerveza, toda ella está hecha con chapas de cervezas, no están pintadas, y en el centro se puede ver una litrona de cerveza. La de la derecha toda hecha con mosaico de teselas coloridas y con una ofrenda de frutos y pan, dice: "Magdalena Bazán Espadas. Cuéntame, por piedad, aquellas cosas que me hacían latir el corazón. Tu marido por siempre".